Es un poema de María Victoria Atencia, escritora española, que espero que les guste, me lo envió un amigo bloguero y lo comparto aquí.
El amor
Cuando todo se aquieta en el silencio, vuelvo
al borde de la cuna en que mi niño duerme
con ojos tan cerrados que apenas si podría
entrar hasta su sueño la moneda de un ángel.
Dejados al abrigo de su ternura asoman
por la colcha en desorden, muy cerca de las manos,
los juguetes que tuvo junto a sí todo el día,
ensayando un afecto al que ya soy extraña.
Quien a mí estuvo unido como carne en mi carne,
un poco más se aparta cada instante que vive;
pero esa es mi tristeza y mi alegría a un tiempo,
porque se cierra el círculo y él camina al amor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario