27.8.07

El chiquito...

Cuando Francisco estaba en la panza, y aún no sabíamos su sexo, con mi marido, lo nombrábamos: "el chiquito".
Desde hace unas semanas que a este nuevo bebé, le decimos igual. Me gustó.
De hecho es el más chiquito de la familia. Me gustó porque tiene su lugar, su identidad, su nombre (aunque sea provisional).
Estamos ansiosos por saber si es nena o nene.
Y ya tenemos nombres!!!!!!

22.8.07

Puesta al día

Mi mamá se recupera de una importante cirugía de rodilla.
Entretanto Juan -mi marido-perdió a su abuela. (falleció hace dos semanas)
Tuve que responder preguntas de Francisco acerca de la muerte y la vida. En estas ocasiones me doy cuenta de lo esperanzador que es creer en la vida eterna. (Y valga la recursividad, le agradezco a Dios por creer.)
Vimos de nuevo en la eco a nuestro bebé que se movía que daba gusto y goza de muy buena salud-gracias a Dios. (Una emoción!!!)
Acompañé a Francisco a jugar al "viejito operado". (Juego que compuso para elaborar tantos dolores que lo rodean últimamente)
Empecé a ir a una nutricionista y bajé un kilo en este primer trimestre de embarazo, lo cual me tiene de lo más orgullosa de mi misma.
Tuve un diálogo super interesante con el obstetra y me invitó a participar de un grupo para madres en el que él trabaja.

Bueno...nada...comparto novedades!!
Gracias por pasar!!

Terminando de volver antes de volverme a ir

En éstos días tengo una rara sensación. La que resumo en el título de esta entrada.
Para mi, tener un hijo es irse a otro lugar. Es dejar este mundo, es emprender un viaje sin retorno a zonas ignotas de una misma, de la corporeidad, de la sexualidad, de la pareja, de la familia, del rol profesional, de la posibilidad de elegir, tantas cosas...
Me falta medio año para que, Dios mediante, vea la luz mi hijito y me pregunto si me agarrará todavía no regresada del todo del este bendito mundo de la maternidad reciente.
Qué se yo...

12.8.07

Niños!!!


FELIZ DÍA A TODOS LOS NIÑOS EN SU DÍA!!!!



Especialmente a los hijitos de quienes pasen por aqui!!


5.8.07

Piropo

Ayer mi hijito se quedó mirándome las manos. Acababa de pintarme las uñas. Y se hiló el siguiente diálogo:

F:-Por qué te pintaste las uñas?
yo: -Y, para que me queden mejor.
F:-De qué color te las pintaste?
yo:-Rosa, ves?
F:-Ah! (con cara de asombrado)
yo: -Por qué?
F: -Porque te quedan demasiado lindas!

4.8.07

El robot y el pollito

Cada tanto sucumbimos a una salida fácil. Empezamos el día visitando a mi mamá, que se recupera de una operación de rodilla. Habíamos acompañado a Juan-mi esposo- a donar sangre, después iría a ver a su abuela a la unidad coronaria de un sanatorio en Belgrano y decidimos que sería mejor que Francisco no participara de esa visita. Así que hicimos tiempo en el restaurante de comidas rápidas más cercano.
El juguete de la comida para niños le gustó a Francisco. Un robot bastante fulero, por cierto. Lo compramos y jugó por un buen rato con el bicho ese.Yo lo contemplaba un poco apenada. A los tristes pensamientos sobre la situación de la abuela de mi esposo se sumaba una escena poco feliz. El muñeco ese tirando espadazos-en realidad especie de pistola de caño largo- (por ahora el único arma que conoce mi hijo son las espadas), y mi hijo preguntando sobre la relación entre la valentía y la maldad. Ah! Porque el robot tiene una cara de malo terrible.
En fin...después de un rato Juan nos encontró allí, sació su hambre con alguna cosilla y seguimos viaje.
A la salida había un señor vendedor que en pleno Cabildo ostentaba unos tiernos pollitos mecánicos. Francisco quedó encantado con ellos, aunque no los pidió. Pero yo, solo para brindar un antídoto contra el robot con cara de malo, le ofrecí regalárselo. Él, chocho.
Ya en el auto declaró que en casa jugaría "el juego del robot y el pollito". Dicho y echo. Hacer un rato nomás el pollito torturaba a picotazos al coso ese, que huía despavorido del tierno animalito. Nada...me reconfortó.
Si sirvió esta dramática melange de juguetes para que mi hijo supiera que los valientes pueden temer y animarse a hacer algo noble, bien vale el vértigo.

3.8.07

Dulce experiencia.

Como pequeño homenaje a la Semana Mundial de la Lactancia materna, se me ocurrió compartir algo de lo que fue para mi la experiencia de amamantar a mi hijito hasta los dos años y cinco meses.

"Por deseo, conocimiento y convicción estaba decidida a amamantar. Desde el comienzo de mi primer embarazo fue una inquietud importante. Tenía una fantasía muy fuerte: iba a tener dificultades para amamantar...hoy sé que además de fantasía fue una corazonada. Una corazonada que me llevó a buscar información con avidez y entusiasmo.
A buscar un grupo de apoyo y un pediatra que apoyara nuestra decisión. Supe con el pasar de los meses de los grandes beneficios de amamantar, de los posibles escollos y de las soluciones.
Cuando mi hijo nació por parto natural, quise ponerlo al pecho inmediatamente, de hecho lo hice. Pero mi bebé sólo quería tocarme, olerme, chuparme. Nos mirábamos embelezados, estaba tan en las nubes que ni se me daba por presionarlo. Era un momento tan milagroso y maravillosamente feliz que lo que menos pensaba era en cuestiones prácticas.
Nos costó prenderlo. La neonatóloga me boicoteó de manera brutal. Nos plantamos contra glucosa, estudios y amenazas de daño cerebral por parte de un doctor ignorante y manipulador.
Llamamos al pediatra, a la puericultora del grupo y ambos nos fueron de grandísima ayuda. La primera prendida fue con su ayuda y descomprimió la presión de la mentada neonatóloga. (quien tuvo el gran tacto de decirme, estando yo en trabajo de parto, que era su primer día de trabajo!!!!)
Ya en casa, yo lo ponía al pecho casi constantemente. Pero mi pequeñito succionaba muy despacito y sacaba poquito. Así que perdió mucho peso, esto lo debilitaba aún más y entonces la situación se puso muy crítica.
El pediatra lo vió y me dió una indicaciones que yo malentendí. Mi pezón plano y su mandíbula retraída, más la pérdida de fuerza, nos obligó a complementar hasta que estuviera más fuerte. Tomaba de mi leche-que me extraía con sacaleche eléctrico- cada dos horas, de día y de noche y si no llegaba a sacarme toda la cantidad completaba con fórmula fluída, con gotero. Una hora le llevaba tomar. Una hora descansábamos. La mayoría de las veces se lo daba yo. En ese momento mi madre trabajaba y no tenía mucha gente con quien contar. Mi marido debió volver al trabajo a los dos días de nacido F. así que contaba con su ayuda sólo para la noche. Mientras tanto, entre las tomas lo ponía al pecho para que pudiera aprender.
Una ayuda importante también la recibí en Fundalam. En cuanto a posiciones y formas de prendida.
Recibí apoyo incondicional de toda la familia y amigos. Nadie nos cuestionó en ningún momento la decisión de seguir con la teta sin complementar. Hubiera sido más fácil, rápido, relajado y seguro. Pero no era lo que queríamos. Y no era lo mejor para F. Lo sabíamos y estabamos convencidos.
Finalmente nos fuimos encaminando...F. recuperó peso y fue ganando más. Yo aprendí a prendelo bien y comenzó a fluir la cosa. Antes de cumplir el mes, ya estaba todo superado el problema. Eso si, compensó los primeros días de privación con creces. Mamaba cada dos horas, y media hora de cada pecho. Esto más o menos hasta los tres meses.
Siguió la lactancia exclusiva hasta el sexto mes. Allí comenzamos con los semisólidos que aceptó muy bien. Pero la teta siempre tuvo un lugar importantísimo. Tomaba entre 14 y 8 veces por día. De noche siempre tomó una vez, a lo sumo dos. Dormía con nosotros en la cuna o en nuestra cama, según su demanda.
Fue un esfuerzo muy grande de mi parte. Pero para mi, una muestra de amor. Sentia tanta satisfacción al verlo crecer tan sanito sólo con lo que yo producía para él, verlo sereno, contento, activo, feliz. Que el cansancio y los sacrificios se veían retribuídos plenamente.
Mi esposo constituyó un pilar invaluable. Lo amé mil veces más viéndolo tan paciente, tan comprensivo, tan amoroso, tan fuerte.
Con el pasar de los meses, la teta, además de valiosísimo alimento se transformó en confortación, en mirada, en sostén, en tiempo compartido, en mimo, en demostración de amor.
Y así como constituyó todo eso y sentó sus bases, así fue dejando paso a otras formas de comunicarnos a medida que fue creciendo. Hasta que decidió él mismo dejar de mamar. A los dos años y cinco meses. Solito, maduro, íntegro, libre...
Puedo decir que amamantar fue una de las experiencias más intensas de mi vida. A la par de casarme, concebir y dar a luz. Es para mi, otro jalón del amor, que se multiplica y difunde.
Significó todo mi deseo hacia mi hijito: de alimentar, sostener en la vida, mirar, envolver con amor, adaptarme a él y responder a sus necesidades...y tantas otras cosas.
Tengo la convicción de que la lactancia da una grandísima oportunidad de compartir tiempo amorosamente. De confirmar a tu hijo en su deseo, en respetar sus ritmos, en atender sus necesidades, en darle algo óptimo para panza y corazón.
Para mi, amamantar fue una dulce experiencia, a pesar y gracias a tan dificil comienzo, casi tan dulce como esa leche que manó de mi por tantos meses, sólo para él".

Mariana

Quedó un poco largo el cuento, sepan disculpar...Ojalá mi testimonio sirva para alentar a mamás que desean amamantar y sufren dificultades.

Duro, pero muy bueno!

Duro, pero muy bueno. Tanto como estar dispuesto a atender a tu hijo de noche.

"Bebé entrena mami a dormir:

"Nos preguntamos que pensaría un bebé cuando la mamá lo quiere entrenar para dormir toda la noche, les comparto esta traducción que acabo de hacer de un mensaje que recibí:
Entrenar para dormir…Ok, esta es la situación.
Mi mami me tiene desde hace 7 meses. Los primeros meses fueron fabulosos, yo lloraba y ella me cargaba y me alimentaba, a cualquier hora, día o noche. Luego algo sucedió. Desde hace unas cuantas semanas, ella me ha estado tratando de entrenar para dormir toda la noche. Primero, creí que era solo una fase, pero cada vez se pone peor. He hablado con otros bebés y parece que es bastante común cuando las mamis nos han tenido mas o menos 6 meses.
Y así es la cosa: estas mamis realmente no necesitan dormir. Es solo un hábito. Muchas de ellas ya han tenido 30 años de dormir, así que ya no necesitan dormir más. Así que estoy implementado un plan, le llamo “el llanto inconstante”.
Va así: La noche uno, llora cada 3 horas hasta que te alimenten. Yo se que es duro, es duro ver a tu mami desconsolada con tu llanto. Solamente mantén este pensamiento: “es por su propio bien”
Noche dos: Llora cada dos horas hasta que tu mami te alimente.
Noche tres: llora cada hora.Casi todas la mamis empezaran a responder mas rápidamente después de 3 noches. Algunas mamis son mas alertas, y pueden resistirse al cambio por mas tiempo. Estas mamis pueden parase en tu puerta por horas haciendo SHHH SHHH. No te rindas. No puedo hacer suficiente énfasis acerca de esto: LA CONSISTENCIA ES LA CLAVE!!!
Si la dejas dormir toda la noche solo una vez, ella esperara eso todas las noches. YO SE QUE ES DURO! Pero ella en realidad no necesita dormir, solo se está resistiendo al cambio.
Si tienes una mami especialmente alerta, puedes dejar de llorar por 10 minutos, solo lo suficiente para que ella se vuelva a dormir. Entonces vuelve a llorar. Eventualmente, funcionará. Mi mami una vez se quedo despierta por 10 horas, así que yo se que lo puede hacer.
Ayer, llore cada hora. Uno solo tiene que decidir continuar y no darse por vencido.
SE CONSTANTE! Lloré por cualquier razón que se me ocurrió, mi bolsita para dormir me hacía cosquillas en el pie, sentía una arruga en la sábana. Mi móvil hacia una sombra sobre la pared, repetí y sabia a peras, yo no había comido peras desde el almuerzo, que raro no? El gato dijo miau. Ya debería saberlo. Mi mami me recuerda eso como 20 veces al día, jajaja. Una vez lloré solo porque me gustó como sonaba cuando hacía eco en el monitor en el otro cuarto. Demasiado calor, demasiado frío, no importa! Mantente llorando!!
Me tarde un poco, pero funciono. Me alimentó a las 4 a.m. Para mañana mi meta es a las 3:30 a.m. Necesitas ir acortando el intervalo entre las tomas para cambiar el reloj interno de tu mami.
PD: No dejes que esas cosas de plástico te engañen, no importa por cuanto tiempo los chupes, nunca les saldrá leche, créeme".

Copiado de Cozybebé

Semana Mundial de Lactancia Materna

Bajo el lema:"La primera hora de amamantamiento salva la vida a un millon de bebés", estamos celebrando la Semana Mundial de la Lactancia Materna (del 1° al 7 de Agosto) .
Es la celebracion social mas relevante a favor del amamantamiento en la cual participan 120 paises.

2.8.07

Juegos simples e interesantes (2)

2- Sombras chinescas

Todos las hemos jugado alguna vez. Un juego casero, que permite desplegar la imaginación y compartir un agradable y "misterioso" momento.
Sombras chinescas. Sólo se requiere una luz, una habitación oscura, una pared clara para proyectar y manos. Para compartir en una tarde lluviosa, una noche de desvelo o cuando tengan ganas.