8.12.05

Cosa de familia

Hoy charlaba con una amiga que está buscando obra social - hace poco cambió de trabajo y está sin cobertura por el momento - y con su esposo, están pensando en tener un hijito pronto. Pero antes de concebirlo, tiene que pensar que médico la atenderá, donde nacerá el bebé y además tiene que tener una antiguedad mínima en la pre-paga para tener derecho a la cobertura del parto y todo eso.
Y la verdad, me dió bronca. Pobre, está bien lo que está haciendo. No fue eso lo que me enojó, sino que las cosas están mal, pareciera que hay que pedirle permiso a la obra social para tener un hijo, el médico, la clínica y la mar en coche tienen que dar el visto bueno.
Más allá de algún que otro consejito, me guardé para otro día decirle esto. Pero se lo voy a decir. Que no deje que la estructura de "salud", que los médicos se apropien del maravilloso milagro que es traer una criatura al mundo.
No es un hecho médico, es un hecho social, familiar, misterioso y maravilloso. He dicho!!

4 comentarios:

pao dijo...

Si es cierto lo que decís, da bronca.
Y entiendo perfectamente a tu amiga, yo con tres peques sé que quiero lo mejor para mi hijos y si su salud esta bien atendida me quedo más tranquila.
Acá la seguridad social es buena, a lo mejor demoran mucho para darte cita pero te atienden bien, a mi para el nacimiento de mis hijos me atendieron de maravilla.
Espero que tu amiga pueda solucionar este problema porque no hay nada más hermoso que ser mamá.
saluditos

Lapuntadelobelisco dijo...

Ese es uno de los grandes problemas que tenemos que afrontar las "futuras mamas", siempre, todos tienen que decidir-elegir x nosotras y es este uno de los puntos fuertes que hay que afrontar desde el principio...educar para elegir!

Rochi dijo...

yo tuve a mis dos hijas en el hospital publico...y que queres que te diga, estaba en la misma situacion que tu amiga, y de tanta vuelta quede embarazada ...

no me quejo...pero es TOOODOO UN TEMA que da para largo.

Anónimo dijo...

Este es un tema muuuuuuuy áspero.
Yo, gracias al cielo y a nosotros q nos rompemos el alma laburando y así poder tener la prepaga q tenemos, mi último parto fué en casa. Con mi obstetra q es maravilloso, con mi partera q conozco de años y es una madre para mí a pesar de q tiene mi edad (y es q en el parto nosotras maternamos a nuestro hijito q está llegando, y a nosotras quién nos materna?), el neonatólogo q también es el pediatra de mi hija de 6 años desde q nació, una psicológa amiga q filmaba y por supuesto, mi marido, q sin él nada de ello hubiera sucedido, en el sentido más amplio de la frase. Y todo sucedió a la luz de unas pocas velas, yo sentada en un banquito herradura q me permitía afirmarme con fuerza al piso, y mi esposo detrás mío sosteniéndome y ayudándome en cada contracción. Para mí, el parto ideal. Sin episiotomía de rutina, sin goteo, ni anestesia de ningún tipo, ni enfermeras q entran y salen, con la intimidad q un nacimiento se merece y ocurriendo en el mismo lugar donde ese bebé había sido concebido. Muy fuerte, pero vivido a full. Con todos los sentidos puestos al servicio de la vida.
Y absolutamente corridos del sistema. No fuera de él, si no tomando lo q del sistema nos servía. Ya se q es una jugada. Pero es lo q creemos mejor para nosotros y para nuestros hijos.
Y es una alternativa. Para pensar.

Tenía pensado hacer un post con este tema pero salió espontáneamente por acá. Perdón Maru por usar tanto espacio.

Besos.