El domingo, durante la reunión familiar, mi hijo contó a todos sobre un juego que él había inventado en casa, de representar animales, su papá, el y yo, que él nos asigna. Y así, otros miembros de la familia, le comenzaron a preguntar que animal serían. Se hizo muy divertido porque todos tenían un animal que representar en una "fiesta de disfraces". Mi cuñada le puso nombre al evento y él se deslumbró. Así que está organizando una, con participación de todos sus allegados. Lo mejor es que la elección de personaje no es para nada casual y resulta muy gracioso intuir el significado de su asignación.
En estos días viene muy entusiasmado con disfrazarse -las caretas no le alcanzan-y explota al máximo mi capacidad de improvisación de disfraces. Aunque para hacer algo de más calidad, pedí a mi madre que me diera una mano con la costura. Así que aqui estamos, diseñando disfraces para F. de los más diversos exponentes de la fauna, como se imaginarán.
El primero y más requerido es un disfraz de oso koala, (los conoció hace poco y le gustaron porque llevan a los bebés en la espalda).
La idea es hacerle una capucha con las orejitas y nariz características, una especie de poncho y mitones con uñas negras. Con un material muy barato que se llama felpina. (para mamás argentinas: 1,50$ el metro de doble ancho de tela) Hoy mi mamá compró los materiales y mañana comenzamos a hacer los disfraces.
Después les muestro como quedaron!!
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